Ojo con el razonamiento que acabas de exponer... porque es lo que dice alguien que ha vendido preferentes... el vendedor tiene también una responsabilidad grande, no todo vale... aunque esa responsabilidad sea autoimpuesta y vaya en contra el bienestar económico de la empresa a corto plazo, hay una responsabilidad para con las personas que confían en ti y creen en tu palabra, así como con la empresa que también tiene que pensar que el pan para hoy puede suponer hambre para mañana... Un scout se debe preocupar por los managers que ostentan jugadores futuribles, quizás no a corto plazo, pero sí a largo plazo... un mundo salvaje donde cada uno puede hacer lo que más le convenga sin preocuparse de lo que puede ocasionar a los demás no es muy halagüeño que digamos, ya que dejas la puerta abierta a aprovecharse de la ignorancia, e igual que tú te puedes aprovechar de la ignorancia de otro en tu campo... hay otro que se puede aprovechar de ti en un campo que no conoces... vamos... yo no estoy de acuerdo con esa forma de pensar en absoluto en ningún campo... y es bb no será una excepción... y me extraña, porque normalmente estoy totalmente de acuerdo con tus exposiciones.
Yo más bien diría: ojo con las comparaciones que se hacen porque se acaba llevando el tema a un extremo ridículo.
Cuando alguien vende lo que sea, es evidente que no es objetivo, es parte interesada y como tal, destaca lo bueno, no explicita del mismo modo lo menos bueno y además argumenta las objeciones que se le plantean. Esto es lo más básico de un curso de ventas de lo que sea.
Otra cosa muy diferente es que entidades a las que se les supone una responsabilidad social (especialmente las cajas de ahorros) arruinen a ahorradores mayoritariamente de avanzada edad, sin cultura financiera, con la venta de un producto de inversión complejo, no líquido, no creado para este perfil de cliente sino justamente el contrario (grandes fondos, inversores institucionales, etc.), inclumpliendo la normativa de transparencia que debe primar cuando contratas un producto financiero, por tanto sin asegurarse de que el inversor entiende lo que contrata, sino más bien lo contrario. Esto es una estafa masiva.
Volviendo al razonamiento que exponía al principio, generalmente en función del puesto que se ocupa e incluso del público al que te diriges, el enfoque de la comunicación es diferente, sin que ello signifique una estafa, obviamente.
Sin ir más lejos, el presidente de una empresa utiliza y enfatiza unos argumentos en detrimento de otros, en función de si se dirige a sus empleados, clientes, accionistas o consejo de administración, y en todos los casos puede estar diciendo la verdad.
Pero es que esto pasa a todos los niveles, hasta en este juego. Cuando el staff te pide que entrenes forma porque esta semana la selección juega un partido decisivo, no lo hace pensando en tus intereses. No me imagino una conversación del tipo: "esta semana puedes reventar a tu jugador yendo a por los tres partidos porque te veo con opciones de ganarlos todos, o bien puedes entrenar forma porque la selección juega un partido importantísimo", o cuando un manager no piensa entrenar un histórico de 18 años que le ha salido en el draft, tampoco creo que se le diga "puedes quedarte al jugador aunque no lo entrenes si es tu ilusión o bien vendérselo a tal manager que lo entrenará y de paso le sacas una pasta", o cuando te proponen darle pases a un pívot, no te suelen decir: "si pones a tu jugador en la posición de pívot te rendirá más pero para la selección mejor que entrene pases".
Para mí, pretender que la comunicación del scout hacia el propietario del jugador sea objetiva y se centre al mismo nivel en los intereses de ambos, es hacer apología de una moralidad inexistente.